viernes, 11 de marzo de 2011

Duda

Acabo de caer... Si la gonorrea es una enfermedad de transmisión sexual, ¿la verborrea es lo mismo, pero en la lengua?

scb

jueves, 10 de marzo de 2011

Para que voy a pensar, si ya lo hacen por mi...

Estoy cansado de hablar de política y que esos con los que discuto atribuyan todos los males al partido contrario y no vean lo extremadamente mal que lo hace el propio...
Estoy cansado de escuchar a cierta gente que piensa de cierta forma por pertenecer a cierto partido, a cierto grupo de amigos o a cierta clase social, y que critique a los de enfrente sólo porque no estaría bien que le oyeran criticar a los suyos...
Estoy cansado de que algunas personas asuman como dogma lo que sus líderes defienden, sin tener los arrestos necesarios como para poder criticarlos...
Estoy cansado de que la gente crea a pies juntillas que los de enfrente son unos mentirosos, manipuladores, ineptos, no como los del lado propio que son honrados, sinceros y eficientes...
No sé si quiero pensar que estas legiones de fieles seguidores sólo hacen su papel, y en absoluto piensan que sus idolatrados son infalibles, y no sé si quiero pensar eso porque entonces estaría insultándolos directamente. Estaría diciéndoles que no tienen personalidad alguna, ni criterio, ni son capaces de tener ideas o pensamientos propios, y si resulta que sí que son capaces lo que no tienen es valor para decirlo en voz alta.
Estos adeptos asumen y distribuyen como propios discursos cuya única intención es convencer de que el poder está mejor gestionado conmigo que con ellos, sin darse cuenta o sin querer darse cuenta que el único objetivo es conseguir ese poder por encima de todo, sin tener en cuenta que la finalidad de la política en sí es gestionar los recursos en bien de la sociedad, y nunca en beneficio propio.
Y es por esto que no logro entender como fanáticos de uno u otro lado no quieren ver los fallos de sus líderes: una serie de políticos que con tal de no perder ese poder no son capaces de irse a su casa a pesar de la evidencia de su ineptitud, o de otros que no reconocen que los han descubierto sacando beneficio propio y tienen la cara tan dura como para seguir haciéndolo.
Y ahora el lector que quiera puede creer esto a pies juntillas, hacerlo suyo, defenderlo e incluso utilizarlo como argumento en cualquier conversación, teniendo en cuenta que lo único que estaría haciendo es lo mismo que hacen esos fieles, fanáticos, crédulos y partidistas, es decir no pensar.
Y habrá gente que diga que para que voy a pensar, si ya lo hacen por mi...

scb